Debido a que el sistema de frenado del automóvil supone un elemento primordial de seguridad, la comprobación del correcto funcionamiento del mismo debe realizarse de manera cautelar y normalizada, acorde a unos parámetros de comprobación específicos, de manera que se garantice lo máximo posible su adecuado funcionamiento en caso de frenada de emergencia.
Además de todas las averías que te mostramos aquí, puedes ver los tipos de frenos y funcionamiento.
Qué vamos a leer
Las diferentes pruebas realizadas en el sistema de frenado, deben llevarse a cabo de manera que se compruebe la presencia de posibles síntomas que comprendan fallos en el sistema, como pueden ser:
Fallos de frenos
Presencia de elasticidad en el pedal de freno al pisarlo
Puede estar debido a:
- Presencia de aire en el circuito, ante lo cual hay que proceder a su purga.
- Entrada de aire en la bomba, ante lo cual habrá que desmontarla para repararla.
- Inadecuación del líquido de frenos, ante lo cual deberá sustituirse.
Los frenos se bloquean al soltar el pedal
Esto puede estar debido a:
- El orificio de compensación de la bomba está obstruido, por lo que habrá que proceder a su desmontaje y limpieza.
- Las varillas de mando están mal regladas, impidiendo el retroceso del émbolo en su trayectoria al completo, ante lo cual hay que proceder a su correcto reglaje.
- Las copelas de la bomba están descompuestas por la existencia de petróleo, aceite o gasolina en el líquido de frenos, por lo que será necesario sustituir las copelas y cambiar el líquido de frenos.
Los muelles de retroceso de las zapatas están dañados
Ante lo cual habrá que sustituirlos, revisaremos:
- Las zapatas tienen grasa, por lo que es necesario cambiarlas.
- El servofreno están en mal estado, por lo que será necesario revisarlo y desmontarlo.
Es necesario pisar varias veces el pedal de freno para que la bomba ejerza presión.
Esto se puede deber a:
- La varilla de mando y el pistón de la bomba hacen demasiado juego, por lo que es necesario proceder a su reglaje.
- Las zapatas y los tambores hacen demasiado juego, por lo que será necesario proceder a su reglaje.
La bomba no tiene la presión necesaria aunque se accione varias veces el pedal de freno
Lo que se puede deber a:
- Pérdida de líquido de frenos, ante lo cual habrá que localizar el punto de la fuga y repararlo.
- Presencia de aire en las canalizaciones, por lo que habrá que purgar el sistema.
- Falta de líquido, lo que implica la entrada de aire, ante lo que habrá que purgar el sistema y completar el nivel de aceite.
- Las copelas del cilindro maestro están dañadas, por lo que habrá que desmontar la bomba y sustituirlas.
El pedal posee demasiada trayectoria
Lo que se puede deber a:
- Demasiada holgura en la varilla de mando del pistón de la bomba, por lo que habrá que proceder a su reglaje.
- Demasiada holgura entre las zapatas y el tambor, por lo que habrá que proceder a su reglaje y, en su caso, sustituir las zapatas.
- Los tambores están dilatados debido a un calentamiento excesivo del sistema, por lo que habrá que enfriarlos y, en su caso, sustituirlos.
- El líquido de frenos está deteriorado, por lo que habrá que sustituirlo.
- El servofreno está dañado, por lo que habrá que repararlo.
Presencia de un roce continúo entre las zapatas y el tambor
Revisar:
- Las zapatas están demasiado próximas al tambor, por lo que habrá que proceder a su reglaje.
- Los muelles de retroceso de las zapatas están dañados, por lo que habrá que sustituirlos.
- Los latiguillos de freno están defectuosos y obstruidos, por lo que será necesario sustituirlos y cambiar el líquido de freno.
El frenado está desequilibrado, que tiende a desplazarse hacia un lado
Puede deberse a:
- Fuga de líquido por alguno de los bombines de las ruedas, por lo que habrá que localizar el punto de fuga y repararlo.
- Las zapatas están demasiado próximas en alguna de las ruedas, por lo que será necesario proceder a su reglaje.
- Los pistones de alguno de los bombines están atascados, por lo que habrá que desmontarlos, limpiar el bombín y cambiar los pistones.
- Los forros están llenos de aceite, por lo que habrá que sustituirlos.
- EI tarado del limitador no es correcto, por lo que habrá que proceder a su reglaje.
Los frenos se calientan demasiado
Lo que puede deberse a:
- El cilindro maestro no está bien reservado, por lo que el émbolo no retrocede en su trayectoria completo, ante lo que será necesario proceder a su reglaje.
- Las tuberías de frenos están abatidas, por lo que el retroceso del líquido no se lleva a cabo, ante lo que será necesario cambiar la tubería dañada.
- El mando del freno de mano está agarrotado, ante lo que será necesario desmotarlo, limpiarlo, volver a montarlo y proceder a su reglaje.
Los frenos no poseen la debida eficacia
Por lo que es necesario pisar en exceso el pedal para frenar, lo que puede deberse a:
- El servofreno está en mal estado, por lo que será necesario desmontarlo para comprobar la eficacia.
- Los forros están gastados o llenos de aceite, por lo que será necesario sustituirlos.
- Hay aire en el circuito, por lo que será necesario proceder a su purga.
Al frenar hay rumorosidad
Lo que puede deberse a:
- Las pastillas o las zapatas están desgastadas, por lo que será necesario sustituidas y, en su caso, también el disco o tambor.
- Las piezas móviles del freno están muy duras, por lo que será necesario sustituirlas.
- Los componentes del freno están mal instalados, por lo que será necesario proceder a su revisión y adecuado montaje.
Hay vibración en los frenos
Lo que puede estar debido a:
- El disco o el tambor presentan curvatura, por lo que será necesario rectificarlos.
- Hay holgura en el montaje o las fijaciones están demasiado flojas. Será necesario revisar los componentes y proceder a la reparación del montaje.
La revisión del sistema de frenos supone pues, verificar de manera individual cada uno de sus componentes con la finalidad de detectar posibles daños o anomalías y proceder a la oportuna reparación para conseguir la mayor seguridad posible.
Con respecto a las normas para garantizar el funcionamiento de los sistemas de frenos, quedan recogidas en el Real Decreto 2822/1998, de 23 de diciembre, por el que se aprueba el Reglamento General de Vehículos (esta normativa puede estar sujeta a posteriores modificaciones)
Con todos estos consejos el mantenimiento de los frenos será mucho más sencillo. El sistema de suspensión es otro factor muy importante para el funcionamiento correcto de los frenos.