Mantenimiento de un camión de segunda mano

Es difícil no resaltar la importancia de un programa de mantenimiento preventivo. Tanto si tiene un camión como miles, repara y realiza el mantenimiento sistemático a todos los vehículos.

Aprende a crear una lista de comprobación para asegurarte de que el mantenimiento se realiza y se documenta correctamente.

Si realizas el mantenimiento de tu camión de forma regular y proactiva, no sólo conducirás más tranquilo, sino que también podrás prolongar la vida útil de tu vehículo, reducir la posibilidad de costosas reparaciones de emergencia y aumentar el tiempo de actividad.

Sigue leyendo para conocer consejos para planificar un programa de mantenimiento, emplear las listas de comprobación de mantenimiento pertinentes y documentar tu programa de mantenimiento preventivo.

Entender el mantenimiento preventivo

El mantenimiento preventivo no es exclusivo del sector de los camiones nuevos. Los camiones de segunda mano requieren algún nivel de comprobaciones y mantenimiento regular para seguir funcionando al máximo rendimiento.

El mantenimiento preventivo puede incluir muchas pequeñas tareas como la limpieza, el engrase, la comprobación de los niveles de líquidos e incluso la realización de simples inspecciones visuales. El mantenimiento preventivo, en el caso de los vehículos en particular, también suele incluir la sustitución periódica de las piezas que se desgastan con el tiempo, como los limpiaparabrisas, los forros de los frenos, los neumáticos y los filtros de aire.

 

El objetivo de sustituir las piezas y los líquidos en un programa de mantenimiento regular es ahorrar costes a largo plazo, al evitar que surjan problemas más graves y costosos. También se reduce la posibilidad de que un problema surja de forma inesperada, asegurando que no afecte a la capacidad del conductor para manejar el vehículo.

 

Por ejemplo, si controlas regularmente el nivel de aceite de tu vehículo, sabrás cuándo alcanza un hito, como 25.000 km recorridos desde su último cambio de aceite. Cuando se alcance este hito, puedes cambiar el aceite de forma proactiva mientras aún quede algo de aceite. Si no cambias el aceite hasta que se enciendan las luces de aviso -que indican que el depósito está vacío-, corres el riesgo de dañar el motor de tu vehículo. Esto se convierte en un problema mayor, ya que una reparación del motor costará miles de euros más que un cambio de aceite normal. Además, también tienes que tener en cuenta el coste de oportunidad del tiempo de inactividad que necesitará tu vehículo para la reparación del motor, que casi con toda seguridad será mayor que el tiempo de inactividad combinado de varios cambios de aceite preventivos y preprogramados.

 

Aunque un programa de mantenimiento preventivo puede parecer costoso y complejo de aplicar, hay varias formas sencillas de poner en marcha un programa en tu propia flota.

3 pasos para implementar una lista de control de mantenimiento preventivo para camiones

Aunque es desalentador planificar y ejecutar un programa de mantenimiento preventivo para una gran flota de camiones que rara vez están en el mismo lugar al mismo tiempo, hay cuatro sencillos pasos que puedes dar para poner en marcha un programa que te permita cumplir las normas y reducir los costes.

Haz un balance

El primer paso para planificar un programa de mantenimiento preventivo es tomar nota de cada vehículo de tu flota. Como no hay dos vehículos iguales, sus necesidades de mantenimiento pueden ser muy diferentes. Si tienes una flota mixta de vehículos, la complejidad sólo se multiplica. El plan de mantenimiento preventivo de cada camión se basará en factores como la distancia que recorren, el sistema de combustible que utilizan y las condiciones meteorológicas en las que suelen operar. Esta mezcla de factores hace que los programas de mantenimiento preventivo sean una parte compleja, pero importante, de la gestión y la seguridad de las flotas.

 

Planifica un calendario para cada vehículo

Ahora que tienes un registro de cada vehículo de tu flota, puedes empezar a elaborar un programa de mantenimiento único para cada uno. En el caso de los semirremolques, el mantenimiento preventivo que hay que hacer será muy diferente según el uso que se haga del camión. Métricas como las horas del motor, los niveles de combustible y el kilometraje pueden utilizarse a menudo como puntos de referencia para ayudarte a predecir cuándo será necesario realizar el próximo mantenimiento de un camión, por lo que es importante hacer un seguimiento exhaustivo de estos indicadores para cada vehículo de tu flota.

 

Otras veces, el mantenimiento preventivo puede hacerse de forma oportunista. Esto te permite aprovechar el tiempo de inactividad entre viajes. Hacer pequeñas reparaciones durante el tiempo de inactividad te ahorrará la desafortunada posibilidad de que una reparación necesaria surja al mismo tiempo que un trabajo esencial.

 

Forma a los conductores en las inspecciones

Los conductores de tus camiones son los ojos y los oídos de tu operación, y casi siempre serán los responsables de realizar las revisiones de los vehículos que son necesarias para mantener un programa de mantenimiento preventivo. Para dotar a tus conductores de los conocimientos necesarios para realizar una inspección previa al viaje que cubra todas las áreas relevantes, considera la posibilidad de crear una lista de comprobación de mantenimiento que abarque las siguientes categorías:

 

Frenos: Después del cinturón de seguridad, los frenos son uno de los sistemas más importantes para salvar vidas en cualquier vehículo. Sin embargo, también se deterioran rápidamente con el uso, por lo que es importante que se sometan a una inspección exhaustiva antes de iniciar un viaje. Para que tus conductores lo hagan con éxito, haz que inspeccionen el revestimiento de los frenos para asegurarse de que no hay fugas en el sistema de presión de aire.

 

Neumáticos: Una de las piezas más utilizadas y sustituidas de cualquier vehículo son los neumáticos, por lo que es especialmente importante revisarlos a menudo. Un neumático excesivamente desgastado puede convertirse en un gran peligro para un semirremolque si no se soluciona adecuadamente. Por ello, tanto la presión del aire como la profundidad de la banda de rodadura deben examinarse con regularidad.

 

Líquidos: Las fugas de líquidos pueden ser problemáticas y costosas para el operador de un semirremolque. Comprobando por debajo del tren de rodaje, un conductor puede determinar normalmente si se han producido fugas. Los conductores también deben comprobar con frecuencia los niveles de fluidos del refrigerante, el anticongelante, el combustible y el aceite. Por último, comprobar la presión del aire, la presión del aceite y la temperatura garantizará que todos los fluidos funcionen correctamente.

 

Electricidad: Las luces de tu vehículo te mantienen seguro al ayudar a comunicar tu presencia a otros conductores. Antes de que el conductor empiece a conducir el vehículo, asegúrate de que las luces de advertencia, los intermitentes, las luces de freno y los intermitentes funcionan correctamente. Los conductores también pueden comprobar otros componentes del sistema eléctrico asegurándose de que todos los cables siguen bien conectados y que las luces interiores funcionan.