¿Piensas en comprar una furgoneta de segunda mano pero estás confundido sobre cómo hacerlo? No busques más.
Las furgonetas son el alma de la industria y del camper en estos tiempos. Actualmente hay millones de furgonetas en las carreteras, cada una de ellas recorriendo miles de kilómetros cada año en su búsqueda por ayudar a todo el mundo, desde decoradores y manitas, hasta repartidores y aventureros.
Sin embargo, la desventaja es que comprar una furgoneta de segunda mano puede ser bastante peligroso si no sabes como comprar. Muchas de las que se ponen a la venta habrán tenido vidas agotadoras en obras de construcción o habrán sido conducidos hasta sus límites por las autopistas de la nación.
Entonces, ¿qué necesitas saber antes de comprar furgonetas de segunda mano? ¿Dónde deberías buscar un ejemplo decente y cuánto puede costar? ¿Qué preguntas deberías hacer a sus propietarios y qué debes buscar antes de desprenderte de tu dinero?
Qué vamos a leer
Decide lo que necesitas
Las furgonetas se compran por una variedad de razones. ¿Quieres conducirla a diario o es para transportar a tu familia los fines de semana? ¿El plan es convertirla en una caravana para los fines de semana? ¿Planeas iniciar un negocio y necesitas un potencial caballo de batalla?
La forma en que la utilices determinará el tipo y el tamaño de la furgoneta que necesites. Por ejemplo, ¿Tiene algún sentido comprar una gran bestia de 3,5 toneladas si tienes un negocio de jardinería básica y sólo necesitas llevar una cortadora de césped y un par de palas?
La investigación para comprar una furgoneta
Únete a los foros de propietarios en foros o Facebook para los modelos en los que estés interesado. Disfrutarás de acceso gratuito al conocimiento y la experiencia de los propietarios que están más que dispuestos a compartir sus experiencias, tanto buenas como malas.
También te ayudarán a decidir cuál de la gama es la más deseable, destacarán cualquier problema conocido con años concretos y te dirán qué debes tener en cuenta en cualquier prueba de conducción. También pueden decirte cuánto debes esperar pagar.
Reduciendo la búsqueda
Ciertamente no hay escasez de furgonetas disponibles. Incluso una mirada rápida a los portales online reveló numerosas unidades a la venta. Vigila las páginas y pide a los vendedores que estén atentos a los modelos que más te gustan.
Los foros de propietarios mencionados anteriormente también podrían ser una fuente útil de furgonetas en venta. El problema no será encontrar furgonetas, sino establecer límites de búsqueda. Piensa en cuánto quieres pagar y trata de mantenerte dentro de ese presupuesto, a menos que aparezca algo sorprendente.
Averiguaciones sobre su historia
La forma en que se ha utilizado una furgoneta te dirá mucho sobre su estado de salud. Por ejemplo, un ejemplo de alto kilometraje que ha sido revisado regularmente y sólo se ha utilizado para el transporte de mercancías ligeras, podría ser mejor que uno con menos kilómetros que se ha visto obligado a transportar cargas pesadas.
Pregunta todo lo que puedas sobre una furgoneta antes de organizar una prueba de conducción, y comprueba su historial de ITV. Así como un registro de cuando pasó o falló, esto resaltará los problemas, defectos y avisos de advertencia que se han emitido.
Si decides organizar una prueba de conducción, confirma que está debidamente asegurado, especialmente si se trata de una venta privada. Si no está protegido por la póliza del propietario, entonces puede que tengas que contratar una cobertura a corto plazo.
Habla con tu compañía de seguros para ver cuánto te costará.
Inspección visual
Busca bien los signos de óxido. Preste mucha atención a debajo de los pasos de rueda y alrededor del marco de la puerta, ya que serán más difíciles de ver que en las aletas. Cuando veas el óxido, presiónalo suavemente y si hay leves sonidos de grietas, el problema puede ser más profundo.
También tendrás que buscar cualquier signo de daños o reparaciones por accidente. La falta de coincidencia de los colores de la pintura es a menudo un indicio.
Qué buscar en el exterior
Asegúrate de que los neumáticos son los correctos para la furgoneta y que el desgaste es uniforme en las bandas de rodadura delantera y trasera. Si no, podría haber un problema con la suspensión o la alineación de las ruedas. La profundidad de los neumáticos también debe ser de un mínimo de 1,6 mm.
Se puedes realizar una prueba general de la suspensión presionando fuertemente en una esquina y viendo la rapidez con que rebota. Volverá a su posición original rápida y suavemente si los amortiguadores están en buenas condiciones.
Qué buscar en el interior
Echa un vistazo general al interior. Si han sido las ruedas de un comerciante, puede parecer un poco desgastado, aunque mucha de esta suciedad acumulada se puede limpiar dándole a la camioneta un servicio de restauración completo.
Más importante aún, comprueba que todos los cinturones de seguridad se recogen correctamente, los limpiaparabrisas están en buen estado y los controles electrónicos funcionan. Se aconseja revisar todas las puertas abriéndolas desde dentro y fuera.
Comprueba siempre que la calefacción y el aire acondicionado funcionen y atento a cualquier olor extraño, que podría indicar un componente defectuoso o un bloqueo en el sistema, también debe inspeccionar el compartimento de carga para ver si hay signos de daños.
Señales de advertencia mecánica
Arranca la furgoneta desde el frío y ten cuidado con el humo negro o azul que sale del escape, así como con las luces de advertencia del motor que permanecen encendidas. Escucha cualquier ruido raro de cascabeleo o de golpeteo, especialmente cuando aceleres.
Lo mismo ocurre cuando estás en la prueba de conducción. Presta atención a los chirridos, golpes o rechinidos, especialmente cuando frenes. La dirección debe responder. Si la furgoneta quiere ir por toda la carretera o hay mucho juego, entonces es una señal de advertencia.
Si está contento con la furgoneta, acuerda un precio con el vendedor, y acuerda un tiempo para la recogida. Además, no olvides que tendrás que arreglar los impuestos y el seguro de la furgoneta antes de recogerla.